El Real Madrid desbordó de alegría al celebrar su reciente victoria en la Liga ante miles de seguidores en las calles de Madrid. La atención se centró en el futuro del club, con la final de la Liga de Campeones en el horizonte y los rumores sobre la posible llegada de Kylian Mbappé. Los jugadores, encabezados por Nacho, expresaron su gratitud hacia los aficionados, destacando su papel crucial en esta temporada excepcional. Prometieron volver tras la final de la Champions League, con Luka Modric asegurando que dejarán el alma en el campo. La ceremonia incluyó el tradicional homenaje a la estatua de Cibeles, donde Nacho colocó una bufanda y una bandera del Real Madrid. Además, durante una recepción, el presidente del club, Florentino Pérez, reiteró el compromiso del equipo con la victoria. El evento no estuvo exento de momentos divertidos, como cuando el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, compartió una anécdota sobre el entusiasmo de los niños por Mbappé, provocando risas entre los presentes. »