El PSOE y la alargada sombra del acoso: Denuncia en Inspección de Trabajo tras cese de asesora durante baja psicológica para fichar a Mohammed Azahaf
El cese de una de las asesoras del Grupo Parlamentario Socialista para fichar al que fuera coordinador Federal del Grupo Árabe del PSOE, Mohammed Azahaf, no se ha quedado en un mero ‘intercambio de cromos’ publicado en el BOCCE. Ya hay denuncia presentada ante la Inspección de Trabajo y Seguridad Social de Ceuta.
Es el segundo caso que afecta directamente a la actual cúpula del Grupo encabezada por Melchor León, presidente de la Gestora, y Sebastián Guerrero.
Lo grave es que tras la misma se desliza un presunto caso de acoso que ahora debe ser aclarado. Todo ello tras haberse ejecutado el despido de una trabajadora del Grupo Parlamentario que se encontraba de baja médica, situación que además viene derivada del ambiente laboral vivido.
Cronología de los hechos
El 19 de junio hubo reunión por videoconferencia de la Gestora para proponer ese cese y el fichaje de Azahaf. Un día después, el 20, llegó la petición a manos del presidente de la Ciudad, Juan Vivas, tratándose de un cese que pretendía ejectuarse aun estando la afectada de baja (situación que se había notificado el 11 de junio).
La publicación del BOCCE del pasado viernes sirvió para ejecutar oficialmente el cese de Dalila Mohamed y posterior nombramiento de Azahaf.
Los hechos han sido ya denunciados ante la Inspección de Trabajo, además de haberse trasladado esta situación al canal de denuncias del que dispone el PSOE Federal, que de momento no ha respondido al caso expuesto.
El partido dispone en su página web de un protocolo contra el acoso laboral bastante férreo y claro, en el que se expone la forma de proceder en la prevención, detección y solución de este tipo de situaciones.
De hecho en dicho protocolo se concreta la necesaria protección de las personas denunciantes y la adopción de medidas disciplinarias contra quien acosa.
El cese de esta trabajadora del Grupo Parlamentario Socialista se habría producido estando de baja psicológica, una situación sufrida como consecuencia de unas condiciones laborales que fueron empeorando de forma gradual, por ejemplo, al sufrir una merma de sus funciones sin justificación, entre otras causas.
Se expone en el informe que sustenta esta denuncia haber sufrido situaciones de humillación y desprecio lo que derivó en una situación de estrés continuado.
La afectada no ha hecho declaraciones a este medio, pero sí consta, según fuentes consultadas por este periódico, la presentación de una denuncia ante la Inspección que ya está en curso.
La suma de todos esos factores habría dado pie a una crisis de ansiedad y la posterior presentación de una baja médica el 11 de junio, situación achacada directamente al clima laboral vivido bajo el control del partido ejercido por León y Guerrero.
Lo que se trata ahora de esclarecer es si esa situación laboral vivida en el Grupo tuvo como consecuencia el impacto sobre el bienestar psicológico y emocional de la afectada.
Al margen queda el debate paralelo puesto encima de la mesa de cómo es posible que se ejecute un cese de una trabajadora estando de baja psicológica sin que se haya activado el protocolo.
Este caso no es el único que salpica directamente a la cúpula actual de la Gestora y el Grupo, al constar otra situación ya denunciada en la Policía Nacional a finales de junio por otra trabajadora del partido que señaló directamente a León por difundir su baja médica en un grupo de Whatsapp de la Gestora, dando traslado también de esta situación a la Agencia Española de Protección de Datos para que se pronuncie al respecto.